© Justo Félix Olivari Tenreiro.
En pocas palabras, para los no entendidos en Astrología,
Capricornio representa, entre otras tantas cosas, los sistemas de leyes,
incluyendo el económico como el capitalismo, las normas, las doctrinas, en
definitiva, cualquier clase de estructura, real o simbólica.
El planeta Plutón, regente del signo de Escorpio, nos habla
de re-generación, de muerte, transformación y renovación, de que salga de las
profundidades y se haga visible aquello que venía permaneciendo oculto…
Es sincrónico el ingreso de Plutón a Capricornio en el año
2.008 con la crisis financiera mundial, señalando que la especulación desmedida
y la “burbuja inmobiliaria” debían llegar en algún momento a su fin… También lo
fue con la caída de varias dictaduras de larguísima data en Medio Oriente años
después.
Ahora bien, lo que en los últimos años está aflorando a lo
largo y a lo ancho del globo terráqueo son las noticias que dejan al
descubierto los episodios de corrupción.
Desde figuras de la realeza en algún país europeo, lo
acontecido en la mismísima FIFA (la entidad madre del fútbol mundial), y en sud
América los casos de Brasil y Argentina, en donde están involucradas las más
altas figuras de la política de ambos países, incluyendo ni más ni menos que a
ex presidentes.
En Argentina particularmente nos desayunamos casi a diario
con un nuevo caso de corrupción de empresarios y ex funcionarios, algunos con
ribetes casi tragicómicos…
Según parece va a seguir habiendo, por los siglos de los
siglos, personas que se apropien de los recursos de su comunidad, tal vez esa
mala costumbre esté en el ADN del ser humano.
Pero si estos buenos muchachos supieran o tuvieran algún
tipo de asesoramiento respecto a que en el orden “cósmico” actual no queda
mucho espacio para que esas malversaciones queden impunes y ocultas por mucho
tiempo, a lo mejor se avengan a pensarlo dos veces antes de hacerlo, o, en el
peor de los casos, desarrollen un poco más la creatividad a la hora de robar y
esconder los bienes producto de sus saqueos…
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