© Félix Olivari Tenreiro.
El signo por el que transitaba el Sol en el momento de
nuestro nacimiento es lo que determina nuestro signo zodiacal.
El Sol describe lo que ya somos en esencia… Representa el yo
profundo, el yo verdadero, la identidad básica. La voluntad, los propósitos en
la vida.
Astrológicamente hablando, el Sol describe el principio
masculino, confiable, predecible, directo y concentrado. El Sol significa
también lo paternal. En la Carta Natal de un varón el Sol y Marte son parte de
su identidad masculina, mientras que en la de una mujer esos planetas revelan
su percepción de lo masculino, y eventualmente ciertas características que un
varón debería tener para sentirse atraída por él…
Representa el arquetipo de la nobleza, el honor, la
integridad y la autoridad personal, aunque la arrogancia, la altivez, el
orgullo y el narcisismo son algunos ejemplos de la distorsión del principio
solar.
A medida que trabajamos para desarrollar ese principio,
aprendemos que la expresión total del Sol involucra la integración de la sombra,
ya que no puede existir luz sin sombra. Por lo tanto el logro de una identidad
solar implica que hemos reconocido e integrado también los aspectos oscuros de
nuestra naturaleza…
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